Diariamente nos enfrentamos a pequeñas y grandes molestias, también durante el ritual matutino de afeitarse. Hemos recopilado las mayores quejas relacionadas con el afeitado. Por supuesto, también damos algunos consejos para evitar estas molestias. Nos gustaría saber si estas son también tus irritaciones. Estamos a tu disposición.
1. Cuchillas desafiladas
Antes de que te des cuenta, resulta que la cuchilla o cuchillas está desafilada. Te has enjabonado bien la cara y luego sientes que la cuchilla tira de tu barba. Como ya tienes la cuchilla en tu soporte de afeitado, por supuesto, sigues afeitándote, a pesar de que no se siente bien ni cómodo. Después de afeitarte piensas: '¡Ojalá hubiera cambiado la cuchilla a tiempo!'
Dado que las cuchillas de cartucho modernas de las grandes marcas conocidas son muy caras, a menudo se sigue afeitando demasiado tiempo con una cuchilla desafilada. Como hemos mencionado antes, las cuchillas desafiladas son las que finalmente causan irritaciones durante y después del afeitado.
Consejo
Cambia siempre la cuchilla en un día fijo de la semana. Por ejemplo, cada lunes una nueva cuchilla. O utiliza un dado junto a tu cuchilla para llevar un registro de cuántas veces ya te has afeitado. Este divertido consejo lo escuchamos de un cliente leal.
2. Jabón de afeitar agotado
Por la mañana temprano, aún no estamos completamente despiertos. Somnoliento, giras la tapa de tu jabón de afeitar o crema de afeitar favorito y, para tu gran sorpresa, resulta que se ha acabado. Para gran molestia, tu esposa o pareja grita: '¡Debiste comprar un nuevo jabón de afeitar a tiempo! ¡Te lo dije!' En fin, desafortunadamente esa mañana no puedes afeitarte bien. Por pura desesperación, usas posiblemente una espuma de afeitar lista en una lata o te afeitas con la máquina de afeitar eléctrica.
Consejo
Quizás la próxima vez deberías escuchar mejor a tu esposa o pareja.
3. Tu pareja usa tu cuchilla
Por supuesto, cuidas mucho tus utensilios de afeitado. Después de afeitarte, siempre limpias todo bien porque una cuchilla limpia y estéril es muy importante. Tu cuchilla favorita siempre cuelga impecable en el soporte especial o set de afeitado. A la mañana siguiente, te das cuenta de que tu esposa usó tu cuchilla la noche anterior para afeitarse las piernas. La cuchilla aún está llena de suciedad y pelos. Por supuesto, no vas a volver a usar esa cuchilla y va directamente a la basura. La mayor molestia es, por supuesto, cuando resulta que tu pareja ha usado la última cuchilla. Por enésima vez le dices que debe usar su propia cuchilla. Desafortunadamente, las mujeres no entienden esto.
Consejo
Compra una cuchilla con un mango rosa o verde menta para tu pareja o esconde tus cuchillas.
4. Lugares olvidados después de afeitarse
Después de afeitarte, has limpiado y guardado la maquinilla de afeitar y el pincel de afeitar. Te pasas los dedos por la cara una vez más. Para tu gran molestia, hay algunos pequeños lugares que no has afeitado bien. Muy molesto. Por lo general, se trata de las siguientes partes de la cara:
- en la parte inferior del cuello;
- alrededor de la línea de la mandíbula y la barbilla;
- alrededor del labio superior a la altura de las comisuras de la boca.
Por la siguiente razón, esto es super irritante:
- a pesar de los múltiples pasajes de afeitado, aún no has afeitado bien estos lugares;
- si no lo afeitas bien, estarás todo el día pasándote los dedos por ahí;
- el resto de tu día estarás molesto por esto.
Consejo
Asegúrate de tener siempre, junto a tu maquinilla de afeitar favorita, una segunda maquinilla sencilla y lista para usar. Si de hecho has olvidado estos lugares, puedes usar rápidamente esta segunda maquinilla como 'arma secreta'.
5. Tus utensilios de afeitado no están ordenados
Al igual que en el taller, el garaje o en tu propio cobertizo, las herramientas siempre están colgadas en un lugar fijo. De esta manera, nunca tienes que buscar las herramientas y evitas que puedan dañarse. También tu jabón de afeitar, aftershave, lápiz de aluminio, maquinilla de afeitar y pincel de afeitar están todos ordenadamente en su lugar en el baño. Afeitarse es un ritual. Cada hombre tiene su propio sistema de afeitado y orden de afeitado. Durante el afeitado, no quieres equivocarte y quieres trabajar de la manera más eficiente posible. Si alguien más va a usar tus utensilios de afeitado, siempre quedarán en un orden diferente después de usarlos. O no estarán en el lugar correcto.
Consejo
Crea un espacio propio y cerrable en el mueble del baño.
